Primera jornada:  XXIV Taller de variedades y manejo de soja 2021

Fuente: EEAOC, Publicado en La Gaceta 24 de julio de 2021

El 14 de julio se desarrolló la edición número XXIV Taller de variedades y manejo del cultivo de soja, organizado por el Programa Granos de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC).

Abrió la jornada el Coordinador del Programa Granos y Director del Instituto de Tecnología Agroindustrial para el Noroeste Argentino (ITANOA | EEAOC- CONICET), Ing. Mario Devani, quien destacó la continuidad desde hace 24 años de este taller, “que ya es un clásico para todos los productores y técnicos del cultivo de soja en la región”. Se realizó mediante la plataforma Zoom  y contó con la asistencia de más de 150 personas.

“Agradecemos la gran participación a este taller, el cual lo  venimos realizando de manera continua desde el año 1998. Desde sus  inicio estas jornadas  fueron  pensadas no solo para transferir la información, sino también como un lugar de encuentro entre los investigadores y técnicos de la EEAOC  con los asesores y  productores de la actividad privada. El objetivo es poder interactuar, contar las experiencias, analizar los problemas y buscar posibles soluciones. De esta manera,  a lo largo de todos estos talleres surgieron nuevas líneas de investigación y muchas de las que ya  teníamos las fuimos acomodando a las necesidades que surgían de estos talleres”, resaltó  el ingeniero Mario Devani.

Este es el segundo año que, debido al contexto de pandemia, la institución organiza este evento de manera virtual. Como cada año, expusieron los técnicos de las distintas áreas que conforman el Programa Granos y al final de las charlas los participantes pudieron realizar sus preguntas. En esta oportunidad, el taller fue dividido en dos jornadas. La segunda parte se realizó el miércoles 21 de julio pasado.

La primera disertación estuvo a cargo de la ingeniera Lorena Soulé, técnica de la Sección Agrometeorología de la EEAOC, quien se refirió a las condiciones agroclimáticas de la campaña de soja 2020-2021 en la Provincia de Tucumán.

Principales consideraciones:

-En el aspecto térmico se destacaron valores por debajo de lo normal en el trimestre enero-marzo para las máximas y diciembre-febrero para las mínimas medias.

-En cuanto a las máximas absolutas, superaron los 40ºC en el mes de octubre en todas las localidades, mientras que en el trimestre noviembre-enero, sólo en algunas.

-Con respecto a las condiciones  hídricas, el período analizado se destacó por una marcada heterogeneidad tanto temporal como espacial a través de toda la campaña.

-Los acumulados de precipitaciones en la presente campaña estuvieron por debajo de lo normal y de los de la campaña anterior en toda el área de cultivos de granos.

-Hasta enero, los valores acumulados en esta campaña, tuvieron un comportamiento similar al de la campaña anterior. A partir de allí, si bien hubo un menor aporte de precipitaciones, éstas tuvieron una mejor distribución que en la campaña anterior.

-Solo los meses de noviembre, febrero y mayo (zona norte) y diciembre y marzo (zona sur) tuvieron precipitaciones por encima de los valores normales.

Seguidamente,  los ingenieros Fernando  Ledesma (EEAOC- Sección Granos) y Marcela Escobar (ITANOA-EEAOC-CONICET, Sección granos) brindaron  un análisis del comportamiento varietal de soja en el NOA”.

El análisis del comportamiento varietal de las macroparcelas de la Red, fue realizado tomando los datos de 14 localidades a lo largo del NOA, contando cada una con aproximadamente 32 variedades evaluadas. Es importante remarcar que la Red se realiza desde hace 24 años de manera ininterrumpida para brindar información de los materiales comerciales que ofrecen los semilleros.

El Ing. Ledesma, mostró como los rendimientos de la campaña 2020/2021 fueron superiores a la media de los últimos diez años, y que los rindes de las localidades de Tucumán y zonas cercanas fueron levemente mayores a los de NOA. También que la campaña actual superó a la predecesora con diferencias cercanas al 5%.

A su vez, respecto a los grupos de madurez (GM), tanto en el NOA, como en Tucumán y zonas de influencia,  el grupo de madurez VII fue el que logro mayores rindes. Asimismo se explicó que si bien la tendencia en el tiempo muestra un comportamiento más estable de los materiales de GM VIII, en las campañas anteriores los GM cortos (especialmente el GM VI) se destacaron con rendimientos por arriba de la media y sin diferencias estadísticas significativas, principalmente en Tucumán y alrededores donde lograron una buena adaptación.

Los buenos rendimientos de la presente campaña, a pesar de los menores registros hídricos, podrían explicarse por: a) mejor distribución y menor intensidad de las lluvias en períodos críticos; b) temperaturas máximas moderadas; c) manejos  sustentables; d) mejor oferta de variedades.

El resumen de las variedades destacadas mostró a los siguientes cultivares: GM V ACA 5825 IPRO, CZ 5907 IPRO, GM VI: DM 60i62 IPRO, IS 6.21 IPRO, DM 66r69 RR, CZ 6505 RR, CZ 6806 IPRO, NS 6120 IPRO, NS 6721 IPRO, 66MS 01 RR, GM VII: DM 75i75 IPRO, CZ 7521 IPRO, HO 74134 IPRO, DM 67i70 IPRO; GM VIII: ACA 7890 IPRO.

Por su parte, la Ing.. Escobar, presentó una serie de análisis que por un lado, pretendieron comparar la campaña actual con los últimos 11 ciclos agrícolas en función de sus rendimientos, y por otro, caracterizar el comportamiento de grupos de madurez cortos (V y VI) y largos (VII y VIII) en diferentes períodos de tiempo y ambientes.

Siguiendo esta línea pudo observarse a la campaña 2010/2011 con rendimientos promedios de aproximadamente 3600 kg.ha-1, luego le siguieron 2 ciclos caracterizados por una sequía marcada y rindes muy bajos (2000 kg/ha promedio). Después de una campaña de transición (2013/2014), sucedieron una serie de 6 años con rendimientos buenos a muy buenos y promedios entre 3000 y 3700 kg/ha, entre los que se destaca la campaña 2018/2019. Con respecto a la campaña 2020/2021, los rindes fueron similares a los de esta última serie, promedios cercanos a los 3300 kg/ha y valores máximos y mínimos que oscilaron entre los 2500 y 4000 kg/ha.

Al evaluar el desempeño por grupos de madurez (cortos y largos) pudo observarse una tendencia de mejores resultados por parte de materiales largos en campañas donde las condiciones hídricas fueron deficitarias o los ambientes se caracterizaron por tener menos recursos (entendiendo como ambiente a la combinación de sitio y prácticas agronómicas). Sin embargo, cuando las condiciones son más favorables para el desarrollo adecuado del cultivo, y a medida que mejora la calidad ambiental los grupos cortos pueden expresar su potencial logrando mayores rendimientos.

Finalmente se presentó un análisis de máximos y mínimos en el que se calculan los rendimientos promedio de las variedades participantes de la Red en las últimas campañas, con sus valores máximos y mínimos absolutos. En el caso de los grupos cortos, pudo observarse que ninguno de los genotipos superó el promedio del testigo (DM 60i62 IPRO) y se destacaron los materiales DM 66R69 RR, CZ 5907 IPRO e IS 6.21 IPRO. Considerando los grupos largos, DM 75i75 IPRO, DM 67i70IPRO, Ho 74134 IPRO y NS 8018 IPRO obtuvieron rindes promedio que superaron a la variedad ACA 7890 (testigo largo).

Manejo Agronómico del cultivo de soja

El Ing. José Sánchez, integrante del equipo de la Sección Granos, presentó los resultados preliminares de dos ensayos de manejo agronómico. El primero fue la evaluación de variedades extra cortas (GM IV) en fecha tardía de siembra (enero) y estrechando el distanciamiento entre surcos (26 cm). El mismo determinó que existen opciones de variedades cortas que obtienen rendimientos similares a variedades de GM tradicionales utilizados en nuestra provincia, sembradas en enero e incluso a aquellas sembradas en fechas de estación. Otras ventajas son que liberan temprano el lote (mediados de abril), y que dejarían una mayor cantidad de agua disponible en el perfil del suelo, posibilitando mejores condiciones para la implantación de un cultivo de invierno. Finalmente, se observó que el estrechamiento genera un mejor y más rápido cierre del entresurco.

En el otro ensayo presentado, se evaluaron cuatro densidades de siembra (8, 12, 16 y 20 semillas por metro lineal) con dos variedades (GM VI y VII, ambas indeterminadas y con tecnología Intacta) en dos fechas de siembra (de estación y tardía). Se observó en la fecha de estación que la densidad más baja es la que más disminuye el rendimiento (en algunos casos de manera significativa), mientras que las restantes tres densidades no presentaron diferencias entre sí. Similar tendencia se observó en la fecha tardía, solo que de manera aún más marcada en la disminución del rinde por parte de la densidad de 8 semillas/m.

 Posteriormente, la ingeniera  Carmina Fandos, de la Sección Sensores Remotos, presentó un estudio de los cultivos antecesores en el sistema productivo de granos de Tucumán, en los periodos 2015-2018 y 2018-2021.

Con la finalidad de evaluar la sustentabilidad del sistema productivo de granos, desde el punto de vista de la diversidad de cultivos, se analizaron los cultivos antecesores de los lotes sembrados con soja en Tucumán, en las campañas 2017/18 y 2020/21, y se efectuó una comparación entre ambos estudios.

Se realizó un análisis multitemporal de imágenes categorizadas, aplicando técnicas de SIG. El estudio se circunscribió al agroecosistema granero, excluyendo la superficie con soja utilizada para la práctica de rotación soja/caña de azúcar. En los dos ciclos de soja en estudio se analizaron tres campañas previas de invierno y de verano, considerando la superficie con soja, maíz, trigo y garbanzo.

La superficie cultivada con soja en la campaña 2020/21 registró una disminución de 22.550 ha respecto de la campaña 2017/18, que significó un 12%, menos. La retracción de la superficie sojera se debió mayormente al incremento de la superficie con maíz y al avance de los cultivos de caña de azúcar sobre el área granera.

El análisis de las principales secuencias de cultivos, en los dos periodos, reveló que en verano se produjo un incremento en los porcentajes con maíz, y en invierno un aumento en los porcentuales de garbanzo.

Al analizar los antecesores inmediatos de las dos campañas de soja estudiadas se constató que el 43% de la superficie con soja 2017/18 tuvo como antecesor inmediato de invierno trigo, el 4% garbanzo y el 53% restante barbecho u otros cultivos. Si solo se considera el antecesor inmediato de verano, surge que el 58% de la superficie se cultivó sobre antecesor soja, 30% sobre maíz y 12% sobre barbecho u otros cultivos.

En el caso de la soja 2020/21, el 27% tuvo como antecesor inmediato de invierno trigo, el 3% garbanzo y el 70% restante barbecho u otros cultivos. Con respecto al antecesor inmediato de verano, el 43% de la superficie presentó antecesor soja, 49% maíz y 8% barbecho u otros cultivos.

Al considerar el monocultivo de soja y la rotación con maíz se detectó que el 45% de la superficie con soja 2017/18 no fue alternado con maíz, mientras que el 55% restante fue rotado con maíz, al menos en una campaña. El mismo análisis para la soja 2020/21 indica que el 28% de la superficie no fue intercalado con maíz, mientras que el 72% restante fue rotado con maíz, al menos en una campaña.

La comparación de los antecesores de la soja 2017/18 y de la soja 2020/21 reveló una mejora en las condiciones de sustentabilidad del sistema productivo de granos dada por el incremento en la diversidad del sistema.

Resultados de la encuesta de soja

La ingeniera Virginia Paredes, técnica de la Sección Economía y Estadística, expuso una encuesta de fin de campaña de soja que realiza la Sección Economía de la EEAOC, en la campaña 2020/21, que implicó alrededor de 90.000 hectáreas (ha) de Tucumán (53% de la superficie sembrada en la provincia).  El procesamiento de los datos determinó rendimientos con valores mínimos promedios de 2 t/ha y máximos promedios de más de 4,25 t/ha, estimándose un rinde promedio ponderado de 3,06 t/ha.

Para el análisis de los manejos agronómicos, se relevaron alrededor de 78.000 ha de Tucumán (46% de la superficie sembrada). Se obtuvo como resultado “que en el 60% de ésta superficie  se sembraron variedades de soja con tecnología RR2Bt (Intacta), y en el 70% del área se utilizaron cultivares de grupo de madurez cortos (IV, V y VI)”.

Con respecto a la fertilización, “el 69% de la superficie relevada se fertilizó con fósforo, si bien este valor fue superior a la campaña pasada, el porcentaje del área con niveles de fósforo crítico se incrementó. La principal fuente fosfatada empleada fue el superfosfato triple de calcio, seguido por el superfosfato simple”.

“En cuanto a los aspectos sanitarios, la plaga insectil más frecuente en todos los departamentos fue Rhyssomatus subtilis (picudo negro), en el 58% de la superficie encuestada se realizaron dos aplicaciones de insecticidas, para control de esta y de las otras plagas insectiles presentes.  El 43% de los encuestados detectó problemas con enfermedades foliares, el 24% con enfermedades radiculares y el 35% restante no tuvo problemas.  La principal enfermedad foliar fue la mancha ojo de rana (Cercospora sojina) en la mayoría de los departamentos encuestados.  En  el 93% de la superficie relevada se realizó una sola aplicación siendo las mezclas dobles: triazol y estrobilurina, lo más utilizado.  Las malezas más importantes en esta campaña fueron Amaranthus quitensis RG (ataco), Borreria sp (botón blanco) y Elusine indica (pata de gallina), realizándose tres aplicaciones de herbicidas en el 60% de la superficie relevada.  El 82% dijo no haber tenido problemas de fitotoxicidad”.

Finalmente, la ingeniera Daniela Pérez, Jefa de la Sección Economía, realizó el análisis económico de la campaña de soja.

Se mostraron costos, puntos de indiferencia para el cultivo de soja en la campaña  2020/21 en Tucumán y zona de influencia.  Las determinaciones indican que el gasto por hectárea, desde el barbecho a la cosecha,varió en un rango de 240 y 370 USD/ha (valores sin IVA), según  la problemática y la tecnología empleada. A este monto se debe agregar el gasto de administración y estructura, que puede haber variado entre  70 y 110 USD/ha, el gasto en flete, del orden de los 34 USD/t y  el arriendo. Este último pueda haberse negociado como un valor fijo de alrededor de 120 USD/ha, o como porcentaje del rinde (entre  17%  y  20%).

Los costos en dólares por ha fueron similares a los de la campaña pasada.  Si bien, en general los insumos no aumentaron, si lo hicieron los servicios de siembra y cosecha que crecieron en dólares (15%), en pesos (60%), y en litros de gasoil (15%). Mientras que el servicio de aplicación tuvo precios crecientes en  pesos (38%), pero  decrecientes en dólares. Se observó además una disminución en la cantidad de aplicaciones. Esto último quizás en relación con el incremento de las rotaciones con maíz, la intensificación en el invierno (cobertura o renta), el uso de grupos de soja más cortos y la tecnología Intacta.

Con respecto a los agroquímicos se destacó el fertilizante fosfatado, con una relación precio SPT/soja favorable desde julio de 2020 hasta abril 2021. Esta condición puede estimuló la fertilización, situación que quizás no se repita en 2021/2022 por la suba de precio del fósforo a partir de abril de 2021 (70%). Los que invirtieron antes  de abril en fertilizante para la próxima campaña 2021/22 tomaron una buena decisión.

Lo excepcional del ciclo 2020/21fue la  sustancial suba del precio internacional de la soja, la que si bien no es percibida en su totalidad por los productores locales, debido a los derechos de exportación que paga la oleaginosa del  33% y al retraso cambiario, si provocó un aumento del precio local, el que se oscila desde agosto de 2020 hasta la actualidad en valores en los  320 USD/t.  Con este nivel de precios y para el rango de costos determinados, el  rinde de indiferencia es decir la toneladas que cubren el gasto está entre 1,2 y 2,2 t/ha, valores más que interesantes ya que se encuentran por debajo del rinde promedio de 2020/21 y también del histórico de 2,5 t/ha.