Jornada sobre manejo de suelos en caña de azúcar

(Fuente: EEAOC, publicado en la Gaceta 17 de julio 2021)

El miércoles 7 de julio la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC) llevó a cabo la jornada virtual número 17, del ciclo de conferencias on line 2021, referida al manejo de suelo en caña de azúcar. “En esta capacitación se mostraron los avances que se están realizando en los mapas de suelo del área cañera de Tucumán, fertilización combinada de nutrientes en caña de azúcar y la relación entre el régimen hídrico del suelo con los rendimientos del cañaveral”, señaló el ingeniero Agustín Sanzano, Jefe de la Sección Suelos y Nutrición de la EEAOC.

En la primera disertación el Ing. Agr. Esteban Arroyo, presentó toda la información de los suelos cañeros relevada desde el año 2013 hasta la actualidad y cómo se continúa avanzando sobre áreas cañeras todavía no relevadas. Además mostró los diferentes mapas de suelos a nivel detallado que se construyeron en algunas áreas de los departamentos Monteros, Famaillá y Cruz Alta. También señaló el estado avanzado del mapa de suelo del área agrícola en el departamento Rio Chico, que alcanzará las 27.000 hectáreas donde se describirán las principales características de los suelos de localidades como Santa Ana, Los Córdoba, Aguilares, Los Sarmientos, etc.

Por otro lado, Arroyo resaltó lo importante que es conocer la fertilidad de los suelos donde se desarrollan los cultivos, concepto que abarca aspectos físicos, químicos y biológicos. En su charla presentó los diferentes mapas de fertilidad que se realizaron en la Sección Suelos y Nutrición Vegetal  para el área cañera, resaltando los mapas de fósforo y materia orgánica del suelo, que constituyen una manera práctica para detectar áreas o regiones con distintos niveles de nutrientes que podrían estar limitando el rendimiento cultural del cañaveral. “Toda la información que se muestra a través de estos mapas sirve como instrumento de interpretación y planificación para el manejo de suelos, por lo tanto aquel productor que cuente con información edáfica detallada de sus lotes estará en condiciones de tomar las decisiones más apropiadas para hacer más eficiente el uso de recursos y consecuentemente disminuyendo brechas de rendimiento en su producción”, señaló el técnico.

 Fertilización en Caña de Azúcar: Uso de otros Nutrientes Esenciales

Durante su disertación, el Ing. Agr. Juan I. Romero comentó algunos de los resultados más importantes de los ensayos de fertilización en caña realizados en las últimas campañas en algunos suelos donde se detectaron bajos niveles de algún/os nutrientes.

Los primeros experimentos descriptos, se ubicaron en lotes con bajos a muy bajos niveles de fósforo (P) y materia orgánica (MO). En esta situación, las parcelas de caña a las que se les agregó P, además de nitrógeno (N), mostraron significativos incrementos en los niveles productivos, tanto en el año de aplicación como en la campaña siguiente (efecto residual). Otro resultado destacado de estas experiencias fue el incremento significativo de los rendimientos alcanzados cuando se fertilizó simultáneamente con N, P y azufre (S), siendo ésta una novedad a tener en cuenta en determinadas situaciones de nuestra área cañera.  Además se resaltó que una nutrición más “adecuada” permitió en esos casos prolongar la vida del cañaveral (mayor longevidad de cepa).

El segundo grupo de ensayos se ubicó en suelos arenosos y ácidos del pedemonte, con muy bajos niveles de calcio (Ca), magnesio (Mg) y potasio (K), así también como de MO. En esta situación se plantearon tratamientos con dosis altas, buscando cubrir los requerimientos del cultivo, de N y los demás macronutrientes (excepto P que se encontraba en niveles suficientes). Los resultados mostraron respuestas positivas al agregado de estos nutrientes, especialmente en los tratamientos que combinaban varios de estos. En ciertos tratamientos se lograron incrementos de producción de alrededor del 30% respecto al tratamiento convencional con N, mostrando que en estas situaciones la nutrición puede contribuir a reducir la brecha que existe entre los rendimientos alcanzados y los potenciales.

El ingeniero Francisco Sosa, se refirió al balance hídrico de los suelos y su relación con la producción de caña de azúcar.

“En el área cañera de Tucumán la caña de azúcar se cultiva mayoritariamente en condiciones de secano, el cultivo presenta una elevada demanda hídrica para lograr buenos rendimientos, del orden de los 750-1300 mm.  Por lo tanto, la productividad de los lotes depende en gran parte de la cantidad, frecuencia, intensidad y distribución de las precipitaciones en la campaña. El suelo cumple un rol fundamental en el almacenaje y suministro de agua al cultivo por lo que el conocimiento de su contenido y sus variaciones en el tiempo resulta una herramienta de interés al momento de interpretar los rendimientos”.

“Una vasta superficie del área cañera Tucumana se encuentra en suelos cuya génesis tiene influencia de cursos de agua por lo que presentan elevada variabilidad espacial en sus propiedades; además presentan variaciones en el micro-relieve que determinan distintas relaciones hídricas con el cultivo, generando condiciones tan diversas que en cortas distancias la caña puede estar sujeta a estrés por falta o exceso hídrico”.

“En la sección Suelos y Nutrición Vegetal de la EEAOC se vienen realizando estudios tendientes a relacionar la variabilidad de la producción intra-lote con propiedades del suelo. Los resultados sugieren una estrecha relación entre productividad y propiedades del suelo asociadas a su capacidad de retener agua (textura, profundidad, estructura); por otro lado, la presencia de texturas finas en el perfil y una posición baja en el micriorelieve tienden a generar condiciones de excesos hídricos prolongados que limitan severamente el crecimiento del cultivo. La presencia de una napa freática cercana a la superficie en condiciones de suelos de textura fina puede dar lugar a un ambiente con pH elevado y alto porcentaje de sodio intercambiable donde la cepa se pierde con rapidez. En cualquier caso, el seguimiento del estado hídrico del suelo en la campaña permitió explicar en un alto porcentaje el comportamiento y la producción del cañaveral”.

“Las ambientaciones de lotes deberían tener en cuenta propiedades físicas, químicas y biológicas de suelo tanto en superficie como en profundidad, modelos de elevación digital y mapas de rendimiento o índices de productividad que permitan detectar las principales limitaciones y/o potencialidades de cada ambiente. En este esquema, el conocimiento del estado hídrico del suelo a lo largo del ciclo de cultivo constituye otra herramienta que contribuirá a optimizar la ambientación”, explicó el especialista.

Se recuerda que estas y todas las capacitaciones se encuentran disponibles en el canal de Youtube, EEACO oficial. Enlace de la charla https://www.youtube.com/playlist?list=PLcH7mJf11evsf9L2CJIcLeC0Viy6c-pVy