Día de campo, segunda jornada: macroparcelas de híbridos y poroto

Fuente: EEAOC, publicado en La Gaceta sábado 1 de mayo 2021

Se llevó a cabo la segunda jornada del Día de Campo virtual, donde se presentaron las macroparcelas de maíz y poroto y otros ensayos en la Subestación Monte Redondo de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (EEAOC).

La jornada puede verse en el canal oficial de la institución, enlace https://www.youtube.com/watch?v=3m–C5xr03w&t=146s
El ingeniero Daniel Gamboa, coordinador del Proyecto Trigo y Maíz, resaltó el excelente estado de los maíces y recordó la importancia de poder elegir previamente y determinar en cada campaña, con antelación, el híbrido que se va a sembrar. “La idea es brindar un aporte permanente al productor para que pueda tener los datos suficientes y actualizados sobre el comportamiento de los materiales, tanto nuevos como de los que ya están en curso”, resaltó el ingeniero Gamboa durante la presentación de las charlas.
Junto al ingeniero Franco Scalora, Jefe de la Subestación de Monto Redondo, presentaron los aspectos agronómicos de la red de maíz y las principales características y comportamiento de los híbridos obtenidos. “Estos maíces vienen de un lote de trigo, con problemas de agua en el invierno, poca estructura y problemas de malezas especialmente de gramíneas. Se trabajó realizando un graminicida temprano, en el mes de diciembre; posteriormente se realizaron las aplicaciones de 2,4-D y glifosato, dicamba y premergentes. Luego de la siembra, se hizo un quemante. Respecto a la densidad de siembra, en enero fue de aproximadamente entre 58 y 60 mil semillas”, detalló el ingeniero Scalora. “Se presentaron luego problemas de agua tanto en enero como en febrero, no obstante se obtuvo un buen desarrollo en los cultivos”, añadió el profesional.
Los híbridos que que fueron presentados tenían las siguientes características:
 -Genes resistentes al glifosato y al glufosinato, dos herbicidas muy usados sobre todo para el control de gramíneas de maíz.
 -Genes para control de gusanos tanto en espiga como en planta, lo que configura un gran avance.
 -Ciclos intermedios, con madurez relativa cercana a 126 días.
 -Alto potencial de rendimiento según los antecedentes de cada híbrido y su comportamiento sanitario.
Para esta jornada, el proyecto Legumbres Secas realizó unas parcelas demostrativas con variedades liberadas por la EEAOC. La presentación fue realizada por el ingeniero Lucas Tarulli, de la Sección Granos.
Se presentó TUC 550, que tiene como característica principal la resistencia a la mancha angular; buen comportamiento sanitario frente a virosis, rendimiento entre 2000-2200 kg/ha. TUC 300; material de ciclo corto el mismo es de 75-76 días a cosecha. Es una alternativa para los productores en siembras tardías o para poder escapar a las heladas tempranas, con un rendimiento entre 1200-1500 kg/ha.
Por otro lado se presentó la nueva variedad de poroto blanco tipo comercial navy, liberada recientemente a través del Convenio de Vinculación Tecnológica que mantiene la EEAOC con la empresa Paramerica. Tiene buenos rendimientos que va entre 1900-2000 kg/ha, y muy buen comportamiento sanitario.
“Este nuevo material, por tener un porte erecto, se adapta a la trilla directa; el grano tiene una excelente calidad comercial debido a su color blanco brillante. Esto le permite ser exportado a países europeos como Australia, también es utilizado para la producción de enlatados por las características propias del grano”, detallo el ingeniero.
También se presentaron unas experiencias realizadas con la variedad ya conocida, pero aun vigente, TUC 510. Se inoculó una parcela al momento de la siembra, con cepas especificas de Bradyrhizobium para poroto, y se dejo una de testigo. Además a cada una de estas parcelas (inoculada y testigo) se subdividió en dos y se aplico un bioestimulante foliar precomercial, que tiene la característica de fijar flores y vainas, a dos de estas parcelas con sus respectivos testigos. “El objetivo de estas experiencias es poder obtener mayores rendimientos e incorporar nutrientes fundamentales para el cultivo de poroto”, indicó.
La ingeniera Carmina Fandos, de la Sección Sensores Remotos y SIG mostró el informe de la superficie sembrada con maíz y poroto en la campaña 2020/2021 en Tucumán.
La superficie neta cultivada con maíz en la provincia de Tucumán en la campaña 2020/2021, fue estimada en 95.410 ha, lo que implica un incremento de 6.430 ha en la superficie cultivada con respecto a la campaña pasada, o sea 7,2% más.
El análisis por departamentos revela aumentos de superficie en todos los departamentos. Los mayores incrementos en hectáreas se constataron en La Cocha, Leales y Burruyacu, con 2.110 ha, 1.670 ha y 1.120 ha mas, respectivamente. En los departamentos restantes las subas estuvieron en el orden de las 500 ha. El análisis en porcentaje destaca a los departamentos Simoca y La Cocha con incrementos de 59% y 32% en cada caso.
En cuanto al cultivo de poroto, la superficie neta implantada en la campaña 2020/2021, fue estimada en 10.700 ha, que indica una disminución del área implantada con respecto a la campaña pasada de 3.120 ha, es decir un 22,6% menos.
El detalle departamental revela subas y mermas de superficie. La principal merma en hectáreas se produjo en Burruyacu, con 4.320 ha menos, seguido por Cruz Alta, con 310 ha. Los mayores aumentos en hectáreas se registraron en Graneros y Leales, con 800 ha y 460 ha mas, respectivamente.
La mayor proporción de superficie porotera corresponde a los del tipo “negro”, sin embargo se apreció un aumento en la superficie implantada con poroto mungo (Vigna radiata) respecto a campañas precedentes.
La ingeniera Catalina Aguaysol, de la Sección Fitopatología, se refirió a las evaluaciones de enfermedades foliares en híbridos comerciales de maíz y cultivares pisingallo sembrados en los ensayos de macroparcela ubicados en Overo pozo. Remarcó que las enfermedades foliares que se evaluaron fueron tizón de la hoja (Exserohilum turcicum), mancha gris (Cercospora zeae-maydis) y royas (Puccinia sorghi y Puccinia polysora)
Recalcó, la presencia de tizón de la hoja como la enfermedad que más prevaleció en este ambiente. En híbridos comerciales susceptibles, los niveles de severidad fueron bajos en estados tempranos del cultivo (V8) y, en estado reproductivo, evaluaciones realizadas a principio del mes de abril, se registró hasta un 20% de área foliar afectada principalmente para esta enfermedad. Para algunos cultivares pisingallos la severidad fue hasta un 70%. Se detectaron comportamientos diferenciales en los genotipos evaluados para tizón de la hoja y mancha gris. Los valores más detallados serán analizados y presentados en el próximo taller de maíz.
El licenciado Sebastián Sabaté, de la Sección Manejo de Malezas, hizo referencia a las características de la campaña de granos que está finalizando, recalcando aspectos particulares y algunos de los avances en la investigación en malezas.
“La campaña estuvo signada por la irregularidad en las precipitaciones y eso afectó el desarrollo tanto de las malezas como de los cultivos”. Dependiendo a la fecha de siembra y la organización logística para realizar los manejos de malezas, el éxito dependió fundamentalmente de las condiciones de humedad, tanto para el manejo pre-emergente como post-emergente, así como de la realización de las labores en tiempo y forma.
En lo que respecta a la investigación, se lograron avances para el manejo de los barbechos tanto para soja como para maíz. Del mismo modo, se logró identificar algunas mezclas para la post-emergencia de maíz que permitirían un manejo más eficiente de Borreria, maleza perenne muy problemática en la actualidad.
Respecto del cultivo de poroto, el investigador indicó que se viene trabajando fuertemente para desarrollar nuevas alternativas herbicidas para el manejo de malezas en diferentes tipos de poroto, principalmente negro, mungo, adzuki y rojo. Se realizaron evaluaciones de diferentes herbicidas tanto en pre-siembra como en pre-emergencia del cultivo. “Se detectaron comportamientos dispares y algunas fitotoxicidades marcadas cuando ciertos herbicidas se aplican en pre-emergencia, lo que también está relacionado a la cobertura del lote y la dinámica de lluvias luego de la aplicación” recalcó Sabate. Asimismo, se avanzó en la caracterización de algunas mezclas para el manejo de malezas en post-emergencia del cultivo.
“Toda esta información, ya más procesada y analizada, estará disponible con mayor detalle en los talleres específicos para cada cultivo que tradicionalmente organiza la EEAOC durante el invierno y primavera” finalizó el investigador.
Análisis económico
Por último, la ingeniera Daniela Pérez, jefa de la Sección Economía y Estadísticas, realizó un análisis económico de la campaña. “Comparando la situación con el año pasado para esta fecha, hoy estamos mejor, especialmente desde el punto de vista de los precios”, indicó la especialista.
Los rendimientos van a quedar definidos un poco más adelante, porque recién está comenzando la trilla, sostuvo Pérez. “La expectativa de rindes es por lo menos del orden del promedio de la década que para soja son 2,5 t/ha, para maíz 6,2 t/ha y para los porotos del orden de 1 t/ha. En cuanto a los costos, en dólares son similares a los de 2019/20, si bien aún faltan cerrar cosecha y flete. Los gastos sin incluir la comercialización, estructura y arriendo oscilan entre 220 y 330 USD/ ha para soja y alrededor de 350-400 USD para maíz. Los valores de estructura se ubican entre 60 y 90 USD/ha, el arriendo en 120 USD o entre un 15 y 20% del la producción. El flete que es el componente principal de la comercialización se ubica entre 30 y 40 USD/t”, detalló.
La profesional explicó “que para el día del campo el año pasado el precio de soja rondaba los 210 USD/t y el maíz los 120 USD/t. Por lo que el resultado era negativo, y el rendimiento de indiferencia contrastado con el promedio histórico colocaba a estas producciones en una zona roja para la soja y amarilla para el maíz”.
Finalmente el rinde promedio de la campaña 2019/20 fue de 2,9 t/ha para soja y de 6,9 t/ha para el maíz. En el transcurso de mayo de 2020 la soja comenzó repuntar y a partir de agosto comenzó una recomposición importante del precio tanto de soja como de maíz, llegando a fin de año a valores de 330 USD/t y 200 USD/t, respectivamente. De modo que el resultado terminó dependiendo mucho del momento en el que se vendió, habiendo sido mucho más favorable para los que vendieron hacia fin de año. “Actualmente los precios continúan en niveles altos, y si bien tienen alta variabilidad los niveles actuales están respaldados en un stock bajo y en una demanda sostenida a nivel global. Hasta el momento, con este nivel de precios los rindes de indiferencia, es decir las toneladas de grano con que se cubren los gastos directos, están entre 1,2 y y 2 t/ha para soja y entre 2,7 y 3,5 t/ha para maíz. Esto son valores más que interesantes para la zona, y muy por debajo de los rindes promedio zonales, por lo que los márgenes hasta el momento son positivos. Debe tenerse en cuenta que la cosecha soja recién está comenzando y para el inicio de la de maíz faltan aún más de un mes, comentó Pérez.
“En el caso del poroto negro el precio todavía es incierto, según nos informaron no hay mucha mercadería disponible, así que cuando se intensifique la cosecha el precio será más firme. Ya hay algún movimiento de poroto mungo que está teniendo un precio y un margen interesante”, puntualizó.