¿Cómo impactaron las lluvias en la campaña que está comenzando?

La actual campaña de soja se caracterizó por las siembras tempranas y la presencia de lluvias que favorecieron a la conservación de humedad en los perfiles. Sin embargo, tras cubrir el grueso de la siembra, los excesos hídricos son preocupantes y amenazan al futuro de la campaña, debido a la fuerte escorrentía que se registró en los lotes.

Una nueva campaña de granos gruesos dio comienzo en la provincia. En el caso particular de la soja, las condiciones ambientales y las lluvias del último período provocaron una acumulación de agua propicia para comenzar con la siembra temprana desde el mes de noviembre, con el grueso del cultivo implantado.

“Hay productores que inclusive ya comenzaron a sembrar maíz desde hace un tiempo, y hay otros que se encuentran finalizando esta etapa con soja con avances bastante importantes que abarcan más del 50 u 80%” señaló a Suena a Campo el IngenieroFernando Ledesma, Coordinador del Proyecto Soja de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres.

Teniendo en cuenta los diferentes estadios en los que se encuentra el cultivo, las últimas lluvias actuaron positivamente en el mantenimiento de humedad de los perfiles, favoreciendo al buen desarrollo de la campaña. Pero debido a la gran cantidad de agua caída, ya se empezaron a observar en los campos algunas dificultades  debido a una escorrentía muy fuerte, produciendo el arrasamiento del rastrojo e incluso de parte de los perfiles más superficiales.

“Esto ocasionó muchas pérdidas. Hubo algunos lotes en donde se observaron daños totales que desembocarían en alguna resiembra o de lo contrario, los productores decidirán quedar a la la espera y observar cómo va desarrollándose esta situación para luego tomar ciertas decisiones. La situación comienza a ser preocupante, ya que más lluvias producirían mayores escorrentías” enfatizó.

Fueron muchas las zonas que padecieron estos efectos, entre las principales, se encuentran los Departamentos de Burruyacú y Cruz Alta, además de la zona sur de Tucumán. Los daños no sólo fueron a nivel de los lotes, sino también a nivel de infraestructura, con un deterioro importante de la caminería, puentes y anegamiento de accesos.

A pesar de esta situación, las perspectivas para los próximos meses son óptimas siempre y cuando el agua y las condiciones acompañen y ayuden a obtener buenos rendimientos. Por otro lado, el especialista remarcó que la actual campaña de soja se caracterizó por la siembra temprana, un aspecto positivo para alcanzar altos potenciales de rindes, pero en contrapartida, a veces sucede que las siembras muy tempranas pueden estar vinculadas a mucha variablidad de tales rindes.

“Todavía nos queda mucho tiempo por recorrer. Debemos estar pendientes y observar cómo podrían afectar los diferentes estreses térmicos al ciclo del cultivo de soja” finalizó.

(Fuente: Suena a Campo)